Falo pinturas y tallas de madera eran omnipresentes, como los chiles rojos, todo Bután. Pero ahora están desapareciendo como se somete a Bhután mojigata autocensura Vienen en varios tamaños, colores y adornos. Algunos han cintas atadas a su alrededor como día de fiesta presenta jovial. Otros están en espiral por los dragones de enormes proporciones. Algunos incluso tienen ojos. Por lo general disponen de los testículos peludos, de la bien recortada a lleno-en Yeti estilo. Y, por supuesto, todos son completamente erecto. "Oh, Dios mío," dijo una anciana de visita desde Seattle, cuando ella se bajó del autobús en el valle de Punakha y se encontró rodeado de una concentración alarmante de las imágenes del pene, frente a un telón de fondo del Himalaya magnífica.
Bhután, famosa cuidado del turismo de masas, ha estado tratando de impedir la afluencia de "turistas de volumen" que podrían crear una demanda de estilo de la cultura occidental. Por lo tanto el país de apenas 700.000 mantiene los números de baja mediante el cobro a los visitantes una mínima cuota diaria de hasta $ 250.
Pero hay una tensión.
Dado que el turismo es una fuente importante de ingresos para Bhután, el primer ministro Jigme Thinley anunció a principios de este año que Bhután apunta a triplicar el número de turistas en 2012.
Esto es potencialmente una mala noticia para el culto del pene. Eso es debido a que algunos aquí se preocupe de la afluencia de turistas a este oasis aislados budista ya se está debilitando la esencia de Bhután - a saber, su relación con el falo omnipresente.
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