Un mejor acceso a los supermercados - largo promocionado como una manera de frenar la obesidad en los barrios de bajos ingresos - no mejora la dieta de la población, según una nueva investigación. "El estudio, que evaluó a miles de personas en varias ciudades grandes de 15 años, encontró que la gente no come más frutas y verduras cuando se dispone de supermercados en sus vecindarios. En cambio, los ingresos - y la proximidad a los restaurantes de comida rápida - fueron los principales factores en la elección de alimentos ".
"Los resultados arrojan un poco de agua fría sobre la idea de que la falta de acceso a los productos frescos y otros alimentos saludables es un factor importante en las tasas desproporcionadas de la obesidad entre los pobres, o que simplemente fomentar cadenas de supermercados para abrir en las zonas deprimidas se solucionará el problema , dijo el autor principal del estudio Barry Popkin, director del Programa de Transición Nutricional en la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill.
"Los resultados son significativos porque en los últimos años, las autoridades han estado presionando para que las pautas que limitan el número de restaurantes de comida rápida en barrios de bajos ingresos sobre la base de estudios que reportan menores tasas de obesidad en las comunidades con más supermercados y menos cadenas de comida rápida."
"Por un lado, según los expertos, los supermercados están llenos de opciones que son tan engorde como las comidas rápidas. Por otra parte, los precios de los alimentos saludables, tienda de comestibles son a menudo superiores a los precios de la comida rápida. "
Así que si el ingreso es un factor de control, podría tener un impacto las políticas fiscales? ¿Qué tal un impuesto para los refrescos? Al parecer, un impuesto para los refrescos para reducir la obesidad puede no funcionar .
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